sábado, 28 de junio de 2014

La crisis de 1914

 

Por MARIE-LOUISE HEERS

El 28 de junio de 1914, el archiduque-heredero Francisco Fernando es asesinado en Sarajevo (Bosnia) por un estudiante bosnio. El atentado había sido preparado por una sociedad secreta, La Mano Negra, a la que el gobierno serbio había dejado actuar. Francisco Fernando proyectaba hacer un lugar satisfactorio para los eslavos en el seno del Imperio, lo que habría reducido a la nada todos los proyectos serbo-rusos de crear un gran estado yugoeslavo. Esta era la ocasión esperada por Austria para arreglar la cuenta que tenía pendiente con Serbia, y esta vez Guillermo II sostendrá a fondo a su aliado; el conflicto le parecía vital para Austria, y, en consecuencia, inevitable, de forma que era necesario emprenderlo en las condiciones más favorables que fuese posible. Francia y Rusia no habían terminado aún su recuperación militar y por ello no osarían defender a Serbia. De esta manera, el conflicto podría quedar circunscrito a ambos países. El 23 de julio se remite un ultimátum a Serbia. Ésta rechaza el último artículo, que pretende obligarla a recibir en su propio país a los investigadores austríacos, lo que habría revelado la posible connivencia rusa con el atentado. El 27 de julio, tras rehusar la mediación inglesa, Austria declara la guerra a Serbia. ¿Intervendrá Rusia? Ciertamente, no se encontraba aún preparada, pero no podía, so pena de perder definitivamente toda influencia en los Balcanes, ceder, como ya lo había hecho en 1909. Contaba además con el apoyo de Francia. El 29 procede a realizar una movilización parcial. Inglaterra propone negociar. Guillermo II hubiera aceptado la búsqueda de una solución pacífica, pero el Estado Mayor alemán empujaba a Austria a rehusar. Rusia decreta entonces, el 30 de julio, la movilización general. Sin embargo, los gobiernos de ambos países vacilan todavía en declarar la guerra. El plan alemán estaba previsto para llevar a cabo operaciones sucesivas y no simultáneas contra Francia y Rusia; dejar tiempo a Rusia para que movilizase a sus tropas supondría un desastre cierto para Alemania. La tarde del 1 de agosto Rusia se niega a detener la movilización y Alemania le declara la guerra. El 2 exige de Bélgica paso franco para sus tropas y el 3 declara la guerra a Francia. La invasión de Bélgica decide a Inglaterra a intervenir. El 4 de agosto declara la guerra a Alemania. Italia decide permanecer neutral, proceder que es imitado por Rumania. Las hostilidades comienzan; la guerra, que se suponía iba a ser corta, durará cuatro años y arruinará a Europa.

El mundo contemporáneo (1848-1914)
Ed. EDAF, 1978.

viernes, 27 de junio de 2014

Emma Goldman (145 aniversario)

 [Tal día como hoy, pero del año 1869, nacía Emma Goldman. En su homenaje reproducimos un extracto de la biografia, Emma Goldman, anarquista de ambos mundos, escrita por Josep Peirats.]
 

Las instituciones estatales van y viene, pero el individuo persiste. Este representa la fuente de todos los valores. Al hacer la exaltación del individuo, Emma ponía en guardia contra el grosero individualismo. El laissez faire condujo directamente a la explotación de grandes masas de desheredados. Este tosco individualismo ha sido el principio de la esclavitud moderna en provecho de pretendidos superhombres. América del Norte ofrece un genuino ejemplo de este falso individualismo.

Emma evoca que hubo un tiempo en que se desconocía el Estado y, sin embargo, el hombre existía sin Gobierno organizado. Se vivía en pequeñas colectividades, en las que florecía el arte y una industria a la medida de su tiempo. Se trataba de una sociedad voluntaria de mutua protección. Todo lo más se escuchaba el consejo de los ancianos, que no pretendían dominar al individuo. El Estado tomó forma con la imposición de los físicamente fuertes sobre los débiles. Así pudo avasallar una minoría a la mayoría. Tanto el poder secular como el sacerdotal nacieron para dar una apariencia legal a la explotación. Lo mismo puede decirse del constitucionalismo y la democracia. Quisieron inculcarnos que el hombre es malo por naturaleza. Y que hay que conducirlo de la mano y enderezarlo.

Emma insiste en que el Estado es una abstracción y el individuo la sola realidad. Hasta los filósofos se han prestado a veces a divulgar la infalibilidad del estado. El verdadero racionalismo fue condenado como blasfemo y se hizo del servilismo una virtud. Por lo tanto, todo progreso efectivo implica desenmascaramiento del dogma de la divinidad. Todas nuestras conquistas lo han sido, pese al Estado, en conflicto y lucha con él. Fue la voluntad liberadora quien abrió el camino a la ciencia, la filosofía, el arte y también la industria.

Cualquier concesión al Estado, monárquico o republicano, fascista o bolchevique, se revuelve contra el hombre. Los grandes hitos de la civilización fueron obra de los visionarios, de los profetas, de los idealistas, de los soñadores. Emma cree que no hay otra salida que la revolución.

Josep Peirats


domingo, 22 de junio de 2014

El Ejército niega a una familia unos documentos históricos que les incautó Franco en 1936

Fotografía de la hija y el nieto
del pensador anarquista Ricardo Mella.

Raúl Solleiro reclama unos folletos escritos por su abuelo, el pensador anarquista Ricardo Mella. El Gobierno declaró en 2010 ilegal la causa franquista en la que fueron requisados los documentos, pero Defensa niega su devolución. Un tribunal militar alega que los documentos son «patrimonio documental» del Ejército.

21/06/2014

Raúl Sollerio, de 86 años, quedó huérfano dos veces. La primera en 1936, cuando los militares golpistas ejecutaron a su padre y detuvieron a su madre. La segunda en 1944, cuando su madre murió dos años después de salir de la cárcel de Saturrarán. Ella era Urania Mella, líder feminista en Galicia durante la República e hija de uno de los pioneros del pensamiento anarquista en España, Ricardo Mella. Meses antes de morir le hizo prometer a su hijo Raúl que nunca se metería en política. «Y yo las promesas las cumplo», zanja Raúl, que entonces tenía 17 años.

Nunca militó, pero sus convicciones socialistas y su sed de justicia le llevaron a pedir en 2010 la declaración de reparación y reconocimiento del Ministerio de Justicia, que admite la invalidez de las condenas y sentencias de sus padres. Obtuvo el reconocimiento y en el camino reclamó que le fueran devueltos los documentos incautados por los golpistas a su madre durante el proceso.

Lo que reconoció el Gobierno, no lo aceptó el Ejército. El Tribunal Militar Territorial Cuarto de La Coruña negó el pasado 12 de junio a Raúl el derecho a recuperar los documentos y folletos que incautaron a su madre injustamente. Entre esos papeles se encuentran varias joyas históricas en forma de folletos de su abuelo Ricardo Mella, al que la ministra republicana Federica Montseny definió como «el más lúcido de todos los pensadores anarquistas».

Según el Ministerio de Defensa «los fondos documentales generados por el ejercicio de la jurisdicción militar forman parte del patrimonio documental militar y han de ser objeto de protección como cualquier otro documento histórico en el archivo», dice la resolución judicial. «Si el Ministerio de Justicia dice que mi padre y mi madre fueron condenados de manera ilegal, ¿Por qué no me devuelven los documentos que les fueron robados de manera ilegal?», se pregunta Raúl. El Tribunal responde que los «folletos que fueron incorporados al procedimiento y que forman parte del mismo, debidamente foliados y unidos y que pueden ser considerados como pieza de convicción» pueden ser consultados por los interesados.

Los folletos «de propaganda marxista» que sirvieron al tribunal militar de Vigo de 1936 para condenar a muerte (más tarde conmutada a 30 años de prisión) a Urania Mella por rebelión están: Sindicalismo y socialismo, de José Prat y Sindicalismo y anarquismo, de Ricardo Mella (Ed. Cultura Libertaria de A Coruña); En defensa del anarquismo. Lucha de clases, de Ricardo Mella (Imprenta Germinal de Barcelona) y Llamamiento del Comité Central del Partido Comunista (Prensa Obrera de Madrid).

«Son una especie de incunables que quiero que me devuelvan. Aviso, soy un luchador, he luchado toda mi vida y nunca me he echado atrás. Y me he arruinado cuatro veces», advierte Raúl Sulleiro, que pese a quedarse solo con apenas 17 años progresó hasta llegar a fundar como empresario la patronal gallega y la cámara de comercio.

El legado ausente

De su madre sólo conserva recuerdos de su empeño por ayudar a las mujeres del barrio de Lavadores de Vigo a «leer y escribir en la Casa del Pueblo», un puñado de fotos y su piano. El resto de objetos de su casa en Vigo fue saqueado por militares y vecinos en la guerra. En la causa franquista, junto a los folletos, archivaron una fotografía y el carné de su padre de la empresa de Tranvías Eléctricos de Vigo. Pero Raúl no supo que esos documentos se encontraban ahí hasta que fue avisado por la investigadora Iria Presa, especialista en la vida y obra de Ricardo Mella.

«Supe por unas fotos que los folletos estaban en la causa, pero no fue hasta que los pude ver en el Archivo de Ferrol cuando comprendí que no sólo estaban las portadas sino que estaban completos allí», explica Presa. La historiadora trasladó el hallazgo a la familia, que no dudó en reclamar su devolución. Pero la negativa recibida en junio es la segunda y parece que definitiva. El tribunal militar alega que el artículo 22 de la Ley de Memoria Histórica garantiza a los interesados la recepción de las «copias que se soliciten» y que «los poderes públicos adoptarán medidas necesarias para la protección, la integridad y la catalogación de estos documentos».

«No puedo decir que estén bien conservados porque están cosidos a la causa, lo que provoca que tengas que forzarlos para leerlos o fotografiarlos. De hecho yo no los fotografié enteros para no dañarlos», denuncia Presa. La historiadora gallega cree que el valor de la devolución de esos folletos a Raúl Solleiro tendría el valor de «un verdadero homenaje», más allá «de poner nombres de calles o barcos». Urania Mella, la madre de Raúl y la condenada a muerte en la causa de 1936, cuenta con una calle en Vigo desde 2008 y el Ministerio de Fomento llegó a nombrar a un barco con su nombre, pero con gran revuelo porque los familiares no fueron invitados al acto. «Ahora el barco en lugar de ser un descontaminador es una gasolinera flotante y ya le han cambiado el nombre», se resigna Raúl. 

jueves, 19 de junio de 2014

Contra la democracia burguesa

 

DANIEL GUÈRIN

El anarquista denuncia más vigorosamente que el socialista «autoritario» el engaño de la democracia burguesa.

El Estado burgués democrático, bautizado «nación», es para Stirner tan temible como el antiguo Estado absolutista: «El rey [...] era muy poca cosa si lo comparamos con el monarca que reina ahora, la ‘nación soberana’. El liberalismo sólo es continuación del viejo desprecio por el Yo». «Es cierto que, con el tiempo, han ido extirpándose muchos privilegios, pero ello exclusivamente en provecho del Estado [...] y de ningún modo para fortificar mi Yo».

En opinión de Proudhon, «la democracia no es sino una arbitrariedad constitucional». El proclamar soberano al pueblo fue una «artimaña” de nuestros padres. En realidad, el pueblo es un rey sin dominios, el mono que remeda a los monarcas y que de la majestad y la munificencia reales sólo conserva el título. Reina sin gobernar. Al delegar su soberanía por el ejercicio periódico del sufragio universal, cada tres o cinco años renueva su abdicación. El príncipe fue expulsado del trono, pero se ha mantenido la realeza, perfectamente organizada En las manos del pueblo, cuya educación se descuida adrede, la papeleta del voto es una hábil superchería que sirve únicamente a los intereses de la coalición de barones de la propiedad, el comercio y la industria.

Pero la teoría de la soberanía del pueblo lleva en sí su propia negación. Si el pueblo entero fuese verdaderamente soberano, no habría más gobierno ni gobernados. El soberano quedaría reducido a cero. El Estado no tendría ya ninguna razón de ser, se identificaría con la sociedad y desaparecería dentro de la organización industrial.

Para Bakunin, «en lugar de ser garantía para el pueblo, el sistema representativo crea y garantiza la existencia permanente de una aristocracia gubernamental opuesta al pueblo». El sufragio universal es una trampa, un señuelo, una válvula de seguridad, una máscara tras la cual «se esconde el poder realmente despótico del Estado, cimentado en la banca, la policía y el ejército», «un medio excelente para oprimir y arruinar a un pueblo en nombre y so pretexto de una supuesta voluntad popular».

El anarquista no tiene mucha fe en la emancipación por gracia del voto. Proudhon es abstencionista, al menos en teoría. Estima que «la revolución social corre serio riesgo si se produce a través de la revolución política”. Votar sería un contrasentido, un acto de cobardía, una complicidad con la corrupción del régimen: «Si queremos hacer la guerra a todos los viejos partidos juntos, es fuera del Parlamento y no dentro de él donde debemos buscar lícitamente nuestro campo de batalla». «El sufragio universal es la contrarrevolución». Para constituirse en clase, el proletariado debe primero «escindirse» de la democracia burguesa.

Pero el Proudhon militante no siempre se ciñe a los principios por él enunciados.

En junio de 1848 se deja elegir diputado y atrapar, por un momento, en el fango parlamentario. Dos veces consecutivas, en las elecciones parciales de septiembre de 1848 y en los comicios presidenciales del 10 de diciembre del mismo año, apoya la candidatura de Raspail, uno de los voceros de la extrema izquierda, entonces en prisión. Hasta llega a dejarse deslumbrar por la táctica del «mal menor», y prefiere por ello al general Cavaignac, verdugo del proletariado parisiense, en lugar del aprendiz de dictador Luis Napoleón. Mucho más tarde, en las elecciones de 1863 y 1864, preconiza, sí, el voto en blanco, pero a modo de protesta contra la dictadura imperial y no por oposición al sufragio universal, que ahora califica de «principio democrático por excelencia».

Bakunin y sus partidarios dentro de la Primera Internacional protestan por el epíteto de «abstencionistas» que les endilgan maliciosamente los marxistas. Para ellos, el no concurrir a las urnas no es artículo de fe, sino simple cuestión de táctica. Si bien sostienen que la lucha de clases debe librarse ante todo en el plano económico, rechazan la acusación de que hacen abstracción de la «política». No reprueban la «política» en general sino, solamente, la política burguesa. Sólo encontrarían condenable la revolución política si ella precediera a la revolución social. Se mantienen apartados únicamente de los movimientos políticos cuyo fin inmediato y directo no es la emancipación de los trabajadores. Lo que temen y condenan son las equívocas alianzas electorales con los partidos del radicalismo burgués, del tipo «1818» o «frente popular», como se diría en la actualidad. También se percatan de que, cuando son elegidos diputados y trasladados a las condiciones de vida burguesas, cuando dejan de ser trabajadores para convertirse en gobernantes, los obreros se tornan burgueses, quizá más que los propios burgueses.

Con todo, la actitud de los anarquistas respecto del sufragio universal no es, ni con mucho, coherente y consecuente. Unos consideran el voto como recurso que ha de aceptarse a falta de algo mejor. Otros adoptan una posición inconmovible: aseveran que el uso del voto es condenable, en cualesquiera circunstancias, y hacen de la abstención una cuestión de pureza doctrinaria. Así, en ocasión de las elecciones francesas de mayo de 1924, en las cuales participa la coalición de partidos de izquierda, Malatesta se niega rotundamente a hacer concesiones. Admite que, según la situación, el resultado de las elecciones podría tener consecuencias «buenas» o «malas» y depender, a veces, del voto de los anarquistas, sobre todo cuando las fuerzas de las organizaciones políticas opuestas fueran casi iguales. «¡Pero qué importa! Aun cuando se obtuvieran pequeños progresos como consecuencia directa de una victoria electoral, los anarquistas no deberían concurrir a las urnas». En conclusión: «Los anarquistas se han mantenido siempre puros y siguen siendo el partido revolucionario por excelencia, el partido del porvenir, porque han sido capaces de resistirse al canto de la sirena electoral».

España, en especial, proporciona ejemplos ilustrativos de la incoherencia de la doctrina anarquista en este terreno. En 1930, los anarquistas harán frente común con los partidos de la democracia burguesa a fin de derrocar al dictador Primo de Rivera. Al año siguiente, pese a ser oficialmente abstencionistas, muchos libertarios concurrirán a las urnas con motivo de las elecciones municipales que precipitarán el derrumbe de la monarquía. En las elecciones generales del 19 de noviembre de 1933, sostendrán enérgicamente la abstención electoral, lo cual llevará al poder durante más de dos años a una derecha violentamente antiobrera. Tendrán la precaución de anunciar de antemano que, si su consigna abstencionista trajera como consecuencia la victoria de la reacción, ellos responderían desencadenando la revolución social. Poco después lo intentarán, aunque en vano y a costa de innumerables pérdidas (muertos, heridos, prisioneros). Cuando, a principios de 1936, los partidos izquierdistas se asocien en el Frente Popular, la central anarcosindicalista se verá en figurillas para decidir cuál actitud tomar. Finalmente se pronunciará por la abstención, pero sólo de labios afuera; su campaña será lo suficientemente tibia como para no llegar a las masas, cuya participación en el escrutinio está, de todos modos, ya asegurada. Al acudir a las urnas, el cuerpo electoral logrará el triunfo del Frente Popular (263 diputados izquierdistas contra 181).

Cabe observar que, a despecho de sus furiosos ataques contra la democracia burguesa, los anarquistas reconocen el carácter relativamente progresista de ésta. Hasta Stirner, el más intransigente de todos, deja escapar de tanto en tanto la palabra «progreso”. «Sin duda», concede Proudhon, «cuando un pueblo pasa del Estado monárquico al democrático, ello significa un progreso»; y Bakunin afirma: «No se crea que deseamos [...] criticar al gobierno democrático en beneficio de la monarquía [...]. La república más imperfecta es mil veces mejor que la monarquía más esclarecida [...]. Poco a poco, el régimen democrático eleva a las masas a la vida pública». De tal modo, se desmiente la opinión de Lenin, según la cual «ciertos anarquistas» creen «que al proletariado le es indiferente la forma de opresión». Simultáneamente, se disipa el temor de que el antidemocratismo anarquista pueda confundirse con el antidemocratismo contrarrevolucionario, sospecha expresada por Henri Arvon en su obrita sobre el anarquismo.

El Anarquismo
(1965)

lunes, 16 de junio de 2014

Ataque repugnante a la CGT desde el diario EL MUNDO



Nos lo estábamos temiendo. Algo se estaba fraguando contra la CGT desde los mentideros políticos y financieros. Pensábamos más en algún montaje policial como ya hicieran en otras ocasiones históricas, algo que se podía vislumbrar tras las declaraciones del Director General de la Policía Cosidó, cuando habla de la implantación de un terrorismo anarquista. Pero el nivel de miseria del que son capaces aún nos sigue sorprendiendo.

El momento en el que estamos es muy significativo. Justo dos días después de que el Consejo de Ministros decidiera la privatización de Renfe Viajeros y de AENA, El Mundo arremete contra el único Sindicato que ha actuado contra este robo de lo público.

CGT, ni nadie a través de CGT, se ha enriquecido en una actuación sindical que se ha distinguido por la coherencia, la transparencia y la denuncia permanente de la corrupción. CGT se ha personado como acusación popular o ha actuado judicialmente en casos como los ERE de Andalucía, Bankia, caso Bárcenas, Marina D´Or y las adjudicaciones realizadas por el presidente de les Corts Valencianes, Juan Cotino, a empresas de la trama Gürtel.

El crecimiento permanente de CGT en las Elecciones Sindicales se está viendo desde el poder como una amenaza que hay que neutralizar, con mentiras a falta de otra cosa. Nuestro rechazo explícito a la continuidad de la Monarquía, nuestra amplia participación en las Marchas de la Dignidad, lo ocurrido con las elecciones europeas y nuestra apuesta pública de Abstención activa contra la construcción de esta Europa, la dinámica de luchas que llevamos contra las privatizaciones (Sanidad, Enseñanza, Ferrocarril, AENA, Correos, etc…), contra los recortes sociales, la denuncia contra la represión policial, la defensa de las pensiones….. es algo que no están dispuestos a consentir.

Han estado buscando como ratas, por todas las alcantarillas, algún argumento para atentar contra la CGT. No han encontrado, porque no existe, nada que pueda ensuciar la actuación de CGT con respecto a los ERE, las subvenciones ni con ningún tipo de corrupción, y han sido tan carroñeros como para, profanando la memoria de nuestro compañero Eladio, fallecido hace casi cinco años, rebuscar en su vida privada para lanzar este libelo vomitivo, en el que tampoco han tenido escrúpulos para nombrar a su viuda, ajena a la organización en la que militó su marido, con la clara intención de perjudicarla gravemente, personal y profesionalmente.

La CGT está creciendo cada día y ya es una organización que preocupa a mucha gente poderosa, por lo que debemos estar preparados y preparadas para defendernos de estrategias de acoso y desprestigio tan repugnantes como esta.

El compañero Eladio se casó con quien quiso. Las posibilidades económicas que pudiera tener su esposa procedían de su trabajo, lo que está suficientemente demostrado. Si el matrimonio estaba en régimen de Gananciales es por razones que sólo a ellos competían. Pero cuando Eladio falleció, nadie de su familia heredó nada, porque estaba claro que era un patrimonio que le pertenecía a ella, como así consta en el registro de la propiedad, que el periodista de El Mundo bien conoce ya que al parecer lo ha investigado, y así se le comunicó en su momento cuando se dirigió a CGT.

El sentido de responsabilidad de Eladio con la organización, su coherencia ideológica, su militancia desinteresada en la CGT y la ética intachable con la que ejerció su representación, no ofrece ninguna duda para quienes le conocimos y compartimos con él todas las luchas. Esta basura periodística no va a empañar ni un ápice su imagen y su memoria.

La tendenciosa acusación sobre la vinculación de su supuesto patrimonio con el «Pasillo Verde Ferroviario» no solo es absolutamente falsa, sino que CGT se enfrentó en su momento a esta operación especulativa y al Consorcio que la llevó a cabo, y que se creó cuando Eladio trabajaba como guardagujas en un pueblo de Cantabria.

La CGT no va a consentir este burdo ataque político y mediático a nuestra organización, ni el daño a la imagen de nuestro compañero ni tampoco el que se pretende causar a su viuda. Responderemos como se merecen. Este «periodismo-basura», famoso ya por sus mentiras cotidianas (no olvidemos la «trama de la conspiración» que se inventaron con el atentado de los trenes de Atocha), tendrá que enfrentarse ahora a nuestra estrategia jurídica, comunicativa y a la respuesta sindical y social que ejerceremos con todos los medios que estén a nuestro alcance. CGT tiene muy claro que cuando tocan a uno/a nos tocan todos y a todas.

Su interés es transparente: impedir por cualquier medio, incluida la calumnia a una persona ya fallecida, el imparable ascenso de la CGT que les tiene muy nerviosos. Ello evidencia que lo estamos haciendo bien, que no han encontrado nada con lo que atacarnos, aunque lo han investigado y que son profundamente rastreros quienes lo están intentando.

Convertiremos este ataque miserable, en la mejor propaganda, para que la sociedad conozca la ponzoña que hay detrás de estos medios de desinformación, que trabajan para los poderes políticos y financieros, así como el interés que les guía, el cual nada tiene que ver con dar informaciones veraces a la sociedad.

Nos hemos dirigido a los medios de comunicación que han difundido este libelo para ejercer el derecho de rectificación, y estamos estudiando las actuaciones judiciales que vamos a emprender para que este ataque infame no quede impune.

¡SUS MENTIRAS NO FRENARÁN NUESTRA LUCHA!

domingo, 15 de junio de 2014

Bakunin: El espíritu destructor

 

Por GEORGE WOODCOCK

Entre todos los anarquistas, Mijail Bakunin fue el que, de manera más coherente, vivió y comprendió su papel. En los casos de Godwin, Stirner y Proudhon siempre parece haber una divisoria entre los extremos lógicos o apasionados del pensamiento y las realidades de la vida diaria. Estos hombres terroríficos, tal como les veían sus contemporáneos, sacados de sus estudios se transformarían en el ex-clérigo pedante, en el ceñudo preceptor de señoritas y en el antiguo artesano —orgulloso de su elegante tipografía— que resulta ser un padre de familia modelo. Esto no significa que ninguno de ellos fuera, fundamentalmente incoherente. Tanto Godwin como Proudhon mostraron un valor ejemplar al desafiar a la autoridad cuando así lo ordenaban sus conciencias. Pero su impulso a la rebelión parecía realizarse, por completo, mediante su actividad literaria. Y en el terreno de la acción su falta de convencionalismo raramente pasaba de los más tibios grados de excentricidad.

Bakunin, por el contrario, fue monumentalmente excéntrico, un rebelde que en casi todas sus acciones parecía expresar los aspectos más violentos de la anarquía. Fue el primero de una larga serie de aristócratas que se unieron a la causa anarquista. Jamás perdió una gracia natural, que combinaba con una expansiva bonhomie rusa y con una desconfianza instintiva para con todas las convenciones burguesas. Físicamente era un gigante, y su estampa maciza desmelenadas podía impresionar al auditorio mucho antes de que empezara a conquistar su simpatía con su convincente oratoria. Todos sus apetitos —con la única excepción del sexual— fueron enormes. Hablaba durante noches enteras; era un lector omnívoro; bebía brandy como si fuera vino- En un solo mes de encarcelamiento en Sajonia se fumó 1.600 cigarros y comía de manera tan voraz que el director de la cárcel, un austríaco comprensivo, se sintió movido a concederle ración doble. Virtualmente carecía del sentido de la propiedad o de la seguridad material. Durante una generación vivió de los regalos y prestamos de amigos y admiradores, daba con la misma generosidad con que recibía y, literalmente, no se preocupaba en absoluto del mañana. Era inteligente y culto, pero ingenuo. Espontáneo y afable, pero astuto. Leal hasta el último extremo, pero tan imprudente que exponía constantemente a sus amigos a peligros innecesarios. Como insurrecto y conspirador, como organizador y propagandista, era un energúmeno de entusiasmo revolucionario. Podía inspirar libremente sus ideales a otros hombres y conducirles por su propia voluntad a la acción en las barricadas o en la sala de conferencias.

Pero había veces, en que toda esta actividad enorme e incansable cobraba la apariencia de un gran juego de una infancia prolongada. Y en ocasiones los extremismos de palabra y de obra de Bakunin produjeron pasajes de pura comedia que le convirtieron en la caricatura y no en el ejemplo del anarquista. Le vemos paseando por las calles de una ciudad suiza disfrazado, poco convincentemente, de pastor anglicano. O enviando, ingenuamente, cartas cifradas con la clave escrita en el sobre. O fanfarroneando ante conocidos ocasionales con historias acerca de los enormes, y totalmente imaginarios, ejércitos secretos que tenía a sus órdenes. Es difícil negar la justicia del retrato que con tanta ironía trazó E. H. Carr en la única biografía inglesa de Bakunin.

Pero Bakunin sigue siendo una figura demasiado sólida para descalificarla como un mero excéntrico. Si fue un necio, fue uno de esos necios de Blake, que alcanzan la sabiduría persistiendo en la necedad. Y tuvo la suficiente grandeza —y se acomodó lo bastante adecuadamente a su propia época— para convertirse en uno de los hombres más influyentes en la tradición general revolucionaria y en la historia particular del anarquismo. Y así ha sido, tanto por sus fracasos, como por sus triunfos, y sus fracasos fueron muchos.

El Anarquismo

sábado, 14 de junio de 2014

Los creadores de puestos de trabajo


Por IGNACIO DE LLORENS

Decir que los empresarios son creadores de puestos de trabajo equivale a afirmar que las guerras se declaran para paliar los excesos demográficos. Es evidente que una guerra disminuye los efectivos de población, pero ni el más aventajado de los discípulos de Malthus se habría atrevido a sostener que las guerras se organizan para que toque a todos asiento en el metro.

Las guerras estallan por motivos ideológicos, políticos, económicos, religiosos, etc. La consecuencia inevitable de las mismas es la pérdida de vidas. Y, efectivamente, se produce a resultas de la contienda una disminución de la población, lo cual, en época de apreturas, es en sí mismo positivo. Pero el cinismo no ha llegado todavía al extremo de glosar a los matarifes como agentes del bien demográfico.

Sin embargo, este cinismo de ha enseñoreado ya con abrumadora ubicuidad de los medios de comunicación y la idea según la cual los empresarios son creadores de puestos de trabajo constituye uno de los más preciados tópicos dominantes. Los empresarios —¡habrá que recordarlo!— organizan sus empresas para ganar dinero, con exclusiva ambición de lucro personal, y del poder y ascendencia que se consigue a través de tan poderoso caballero. La consecuencia inevitable es la contratación de personal. El trabajador ocupa el puesto de trabajo, el cual sigue siendo propiedad del empresario, quien obtiene un beneficio del trabajo del operario. La obtención de este beneficio es el motivo de la empresa. Luego, si cada obrero obtuviese el global de lo que produce, el que no trabaja, luego no produce, no obtendría beneficio. El empresario no ocupa puesto de trabajo, en stricto sensu, no tienen lugar, luego se despide a sí mismo. Pero la lógica no impera en la empresa y el que por definición no tiene puesto es en realidad el propietario de todos los puestos de trabajo.

Así es que de la misma manera que a un soldado no se le denomina guardián demográfico, a un empresario no se le puede denominar creador de puestos de trabajo. Pero el Progreso no parece dispuesto a evitarnos ninguna afrenta. Y del mismo en que en la antigua épica homérica al nombre del héroe le acompañaba la cualidad sobresaliente de sus atributos y se nos referían las hazañas de «Héctor, el matador de hombres», «Aquiles, el de los pies ligeros», etc., al héroe por antonomasia de nuestra época se le conoce como «Empresario, el creador de puestos de trabajo». Y así como a aquéllos solían asistirles en sus refriegas dioses de toda laya que clavaban al enemigo puñaladas traperas, también a estos héroes de hoy vienen a socorrerles en sus combates con los desagradecidos disfrutadotes de sus puestos de trabajo toda suerte de personajes endiosados, diosecillos casquivanos del moderno Hades, tales como locutores de radio, columnistas de periódico agradecidos a sus empleadores, rigurosos y científicos profesores universitarios... virtuosos todos de mañas traicioneras.

Los héroes y diosecillos modernos han presentado batalla también en el proceloso Pontos del lenguaje, campo de batalla también en el que consiguen algunas de sus victorias más sonadas, logrando erosionar conceptos y transmutar significados. Así ha ocurrido con el término explotación, antaño fiero cíclope y hoy gatito doméstico. El término explotación actualmente se usa sólo referido a los casos draconianos, de lesa humanidad. Cuando uno trabaja 8 horas y cobra 20.000 pesetas, se le concede, por tan módico precio, que se sienta explotado. Si es el caso que uno gana 40.000 pesetas por las mismas horas, lo cual viene a constituir el sueldo base, pues ya no debe sentirse explotado, se le autoriza a que diga que «va tirando», aunque más le valdría ir recogiendo. Y pasado este ecuador ya nos encontramos ante más o menos «chollos». Pero explotación ha sido desde siempre todo sistema en el que el productor no obtiene lo que produce. Si ese alguien se apropia de lo que produce, ese alguien le roba, le explota. Así, explotarle a uno era robarle por el conocido timo de no darle todo lo que en buena lid le corresponde. Timo fácil de reconocer ya que suele ir acompañado de unas palmaditas en la espalda y de preguntar por la salud de la parienta y la prole del timado.

Lo que de alguna manera viene a dar cima a este cambalache lingüístico es el deslizamiento de términos operado para referirse al propietario y creador de puestos de trabajo. Donde toda la vida se había dicho Amo, Patrón, Burgués... ahora hay que decir Empresario. Y eso, además de cursi, produce un efecto empequeñecedor en quien lo pronuncia, y a la postre se va en camino de lograr que el trabajador sea un mero ocupador de puestos de trabajo, término que conllevará la noción positiva de disfrute de ese puesto. Por donde trabajar será, y ya va siendo, el goce, y la vida sin trabajo, curiosamente denominada paro, el castigo. Inversión de todo sentido.

Revista Archipiélago,
NÚMERO 4 / 1990

viernes, 13 de junio de 2014

Más de 10.000 suicidios en Europa y Norteamérica están relacionados con la crisis


La recesión económica actual puede estar relacionada con más de 10.000 suicidios en toda Europa y América del Norte entre 2008 y 2010. Así concluye un nuevo estudio que muestra cómo la pérdida del empleo, las deudas y los problemas hipotecarios aumentan el riesgo de pensamientos suicidas.

12 junio 2014

La crisis económica que afecta a todos los países del mundo desde 2008 hasta la actualidad se originó en EE UU. Una de sus consecuencias más dramáticas son los llamados 'suicidios económicos’, es decir, las muertes voluntarias por razones financieras.

Ahora, un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Oxford y la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres (ambas en Reino Unido) revela que esta gran crisis se asocia con al menos 10.000 suicidios entre 2008 y 2010. Estos suicidios se consideran económicos.

Los resultados, publicados en The British Journal of Psychiatry, muestran que las tasas de suicidio aumentaron considerablemente en 24 países de la Unión Europea (UE), Canadá y EE UU después de 2007, y el incremento fue cuatro veces más alta entre los hombres.

El equipo analizó los últimos datos de suicidio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y observó que la tendencia a la baja en la UE se invirtió cuando comenzó la crisis económica, aumentando un 6,5% en 2009 y continuando en el nivel más alto hasta 2011. En Canadá los suicidios se incrementaron un 4,5% entre 2007 y 2010; mientras que en EE UU la tasa creció un 4,8% durante el mismo periodo.

Los autores del informe, Aaron Reeves, Martin McKee y David Stückler, argumentan que los datos sobre los suicidios debidos a la penuria económica son una estimación «conservadora» y mantienen que el aumento es «sustancialmente mayor de lo que cabría esperar».

«El incremento de los suicidios no se ha observado en todas partes», explica a Sinc Reeves, del departamento de Sociología de Oxford. «Algunos países han logrado evitar que aumenten, lo que sugiere que la política pública puede mitigar el impacto de las crisis económicas sobre la salud mental y, potencialmente, el suicidio».

El estudio revela que la pérdida de empleo, los embargos de las propiedades y las deudas son los principales factores de riesgo que conducen al suicidio durante las crisis económicas. Además, mientras la mayoría de los suicidios ocurren entre las personas con depresión clínica, hasta la fecha hay pocas pruebas de que los tratamientos con antidepresivos protejan del riesgo de suicidarse.

Sin embargo, el trabajo señala que las tasas de prescripción de este tipo de fármacos han aumentado notablemente en algunos países durante la actual recesión. En Reino Unido, entre 2003 y 2007 se produjo un incremento del 11% en la prescripción de antidepresivos, que alcanzó el 19% entre 2007 y 2010.

Invertir en salvar vidas

La investigación afirma que las naciones que invierten en políticas para activar el mercado laboral reducen el riesgo de suicidio. Los autores calculan que por cada 100 dólares por habitante dedicados a programas que ofrecen asistencia a los desempleados —formación, ayuda en la búsqueda de empleo, subsidio de desempleo—, el riesgo de suicidio se reduce en un 0,4%. Así, Austria, Suecia y Finlandia aparecen como ejemplos de países en los que la tasa de suicidio no ha aumentado de manera notable a pesar del aumento del desempleo durante la recesión.

David Stuckler, también de la Universidad de Oxford, apunta que los suicidios son solo la punta del iceberg: «Estos datos revelan una inminente crisis de salud mental en Europa y América del Norte. En estos tiempos económicos tan difíciles, es fundamental buscar la manera de proteger a los que probablemente sean los más afectados».


Referencia bibliográfica:
Aaron Reeves, Martin McKee y David Stückler. «Economic suicides in Europe and North America's Great Recessions». The British Journal of Psychiatry, 12 June 2014.

jueves, 12 de junio de 2014

Graves disturbios en Sao Paulo a horas de que la ciudad acoja la inauguración del Mundial

 

Manifestantes y policía protagonizan graves incidentes en la ciudad de Sao Paulo, que acoge el primer partido de la cita mundialista. Se han registrado siete heridos, dos de ellos periodistas, y hay al menos un detenido.


Una manifestación en Sao Paulo, a horas de que la ciudad acoja la ceremonia de inauguración la Copa del Mundo de Fútbol, ha derivado en graves incidentes. Hay al menos 7 heridos, dos de ellos periodistas, y un detenido.

Los manifestantes, en torno a 4.000, tratan de bloquear una avenida que da acceso a la sede que acoge la celebración de la ceremonia inaugural del evento y del primer partido, entre Brasil y Croacia. Las fuerzas del orden han usado gases lacrimógenos para disolver la protesta.

Algunos manifestantes han prendido fuego a barricadas y se han enfrentado a los antidisturbios.

La policía militar, señala el diario O Globo, ha advertido que no permitirá que se bloqueen los accesos al estadio.

Es la primera de las diversas protestas que se esperan para este jueves en varias ciudades del país por parte de los grupos que critican el fuerte gasto del Gobierno en la competición.

martes, 10 de junio de 2014

Carta abierta anarquista a quienes viajan al Mundial de la FIFA


 (28 Mayo 2014)

Saludos gente extranjera. Lamentamos interrumpir tu celebración, pero dadas las circunstancias necesitamos que comprendas el contexto real de la Copa del Mundo de fútbol que vienes a ver. Sólo queremos que estés al tanto de informaciones que el gobierno de Brasil y tu agencia de viajes muy probablemente no te dijeron.

La Copa del Mundo asignada a nuestro país por la FIFA tuvo un gasto, hasta el momento en que esta carta es escrita, de 25 mil 600 millones de reales, que vendrían a ser 11.500 millones de dólares. De esta cantidad, más del 83% proviene de las arcas públicas, dinero de los impuestos de la gente común. El salario mínimo en Brasil es de 724 reales por mes ($ 325), las entradas para los juegos pueden llegar a casi un millar de dólares, así que el trabajador brasileño paga por un evento al que no puede asistir. Según una encuesta reciente, el 75,8% de los brasileños se han mostrado contrarios a las inversiones realizadas para esta Copa del Mundo.

Nuestro país aún tiene 3,7 millones de niños y adolescentes fuera de la educación formal y un índice de casi 10% de analfabetismo según la UNESCO. Cómo si tales deficiencias educativas no fuesen suficientes, el gobierno impuso suspensión de actividades escolares durante el Mundial. Vivimos en un país donde más de 242 mil familias no tienen electricidad, por no hablar de la salud pública que aún está lejos de ser aceptable, a pesar de lo cual el ídolo del fútbol Ronaldinho publicamente se atreve a decir que «Con hospitales no se hace la Copa del Mundo».

Hoy vivimos una situación económica muy difícil, donde la población soporta una de las cargas de impuestos más altas del mundo; sin embargo, casi el 50% de nuestro PIB está siendo utilizado para pagar una deuda pública absurda mientras el pueblo pasa hambre, o sea, casi la mitad de la riqueza que producimos se va directamente a los bolsillos de unos pocos banqueros; además, también se pierde una gran cantidad por la corrupción y la mala gestión de los fondos públicos.

El gasto excesivo en la Copa del Mundo es solo la punta de este iceberg. En nombre de la Copa, se violaron muchos derechos civiles, un hecho para nada inusual en un país en el que tenemos una policía altamente militarizada, que ya incluso ha sido criticada por organismos internacionales tales como Amnistía Internacional y la propia ONU, la cual hizo una recomendación para suprimir la PM (policía militar brasileña). Las comunidades cercanas a los estadios paddecerán un cerco policial ostensivo y truculento, incluyendo la presencia del ejército, no para garantizar la seguridad de quienes allí habitan, sino la de ustedes, los turistas, como ya es el caso en el Complexo da Maré [en Rio de Janeiro], que hace semanas está ocupado por el ejército, la marina y la PM, con más de 2.500 hombres. El derecho a la vivienda tampoco quedó fuera de la mira del gobierno y de la FIFA, miles de familias han sido desplazadas debido al evento, incluyendo a las familias indígenas de Aldeia Maracanã [tambien en RJ], que a pesar de la resistencia, fueron desalojados violentamente.

En el régimen «democrático» en el que vivimos, tampoco es novedad para nosotros padecer esta injerencia militar, lo que ya ha ocurrido con el ejército como fuerza represiva que ocupa el lugar de construcción de una central hidroeléctrica en el corazón de la Amazonia (Belo Monte), para evitar la protesta de los pueblos originarios y las comunidades locales afectadas por la represa. Por otra parte, a causa de la presión para construir los estadios a tiempo para la Copa Mundial, más de una docena de trabajadores murieron en las obras de construcción.

Aparte de todos estos problemas, la prostitución infantil en el país sigue siendo una realidad que afecta a cerca de 500.000 menores de edad de acuerdo con el Foro Nacional para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil. Este escenario será potencialmente agravado por la celebración de la Copa.

Muchos de nosotros estamos indignados y hemos tomado las calles en protesta, pero el gobierno —respaldado por los grandes medios de difusión— trata de ocultar y disimular todo lo aquí denunciado, a la vez que criminaliza las manifestaciones y nos reprime con su aparato militar, con saldo de violaciones de los derechos humanos denunciadas por ONG's y organismos internacionales.

El Estado y las burocracias partidistas que lo gestionan no atienden y nunca atenderán como es debido a las demandas populares. Si necesitamos de asistencia sanitaria, educación, vivienda, trabajo tendremos que lograrlo a través de nuestra unidad y lucha.

Recibe esta carta como una solicitud de apoyo. Comparte esta información con la mayor cantidad de gente posible, ayudándonos a mostrar al mundo una realidad que el gobierno, la FIFA y los patrocinadores de la Copa a toda costa tratan de ocultar.


Original en portugués en http://i-f-a.org/index.php/es/; traducido por la redacción de El Libertario.

lunes, 9 de junio de 2014

La masacre del Mundial de Qatar: más de 1.200 muertos en la construcción de los estadios

 

La Confederación Sindical Internacional denunció las tremendas condiciones de trabajo en la preparación de la Copa del Mundo 2022. Y aseguran que podrían morir 4.000 trabajadores más

19/03/2014

El Mundial de Qatar se jugará en 2022, pero ya es noticia. ¿Por qué? Porque según un estudio de la Confederación Sindical Internacional (CSI), por lo menos 1.200 inmigrantes han muerto trabajando en las obras de preparación de los estadios para la Copa del Mundo.

El informe de la CSI destaca la explotación de inmigrantes en Qatar, muchos de ellos bajo condiciones de «semiesclavitud». ¿Cuáles es la situación? Un 90 por ciento de los obreros tienen el pasaporte retenido por los empleadores, un 20 por ciento cobra un sueldo diferente de lo prometido y un 21 no cobran en la fecha acordada.

Lo que denuncia CSI no es nuevo. Amnistía Internacional ya había denunciado las malas condiciones en las obras del Mundial 2022 al afirmar que «Qatar es un país sin conciencia, donde los derechos fundamentales y la libertad del trabajador no existen».

Para redactar el informe, la CSI sólo tuvo acceso a los números facilitados por las embajadas de dos países: India y Nepal. Pero, de los 1.400.000 inmigrantes que trabajan en Qatar, también hay gente de Paquistán, de Sri Lanka y de Filipinas, entre muchas otras nacionalidades y de ellos se desconoce datos de fallecimiento o malos tratos.

Pero el informe no termina ahí. La misma organización asegura que otros 4.000 obreros morirán hasta el comienzo de la competición, los próximos ocho años, en las construcciones de los estadios que albergarán la Copa del Mundo si las condiciones no cambian.

Por países

La embajada de Nepal en Qatar informó a la CSI que 400 obreros murieron en las obras del Mundial desde 2010. Por su parte, India asegura que fueron 218 los fallecidos de su país durante 2013, 237 en 2012 y 239 en 2011 (un promedio de 20 obreros al mes, con un pico de 27 en agosto, cuando las temperaturas pasan de los 50 grados).

¿Qué sufren los obreros? Según la CSI y AI, los trabajadores son expuestos a jornadas que pasan las 12 horas, bajo pésimas condiciones de vida. Por ejemplo, durante una visita en las obras del estadio de Al Wakrah, la CSI encontró a 38 trabajadores de India, Nepal y Tailandia viviendo en casas improvisadas, sin condiciones mínimas de higiene, en el mismo terreno de la construcción.

domingo, 8 de junio de 2014

Los anarquistas de Black Bloc prometen desatar el caos en el Mundial de Brasil


 6 junio 2014

Black Bloc, un grupo brasileño semejante a los grupos antisistema de EE.UU. y de Europa, promete desatar el caos durante el Mundial y amenaza con devolver las protestas del año pasado a las calles brasileñas.

En una entrevista con 16 activistas del movimiento publicada por el diario Estado de Sao Paulo, los Black Bloc explican que planean sembrar el caos en Brasil en respuesta a «la violencia policial, la falta de educación, lo indigno del transporte público y la ausencia de sanidad».

Por su parte, el Gobierno brasileño afirma que autorizará las manifestaciones, pero que no tolerará «vandalismos», ya que los detrozos acarrean gastos de dinero público. «El dinero de los impuestos ya fue robado, ya salió de nuestros bolsillos. ¿Alguien obtuvo [con ese dinero] una salud digna? Entonces, no vengan a hablar de vandalismo», replican por su parte los activistas.

Además, el diario vincula a los miembros de Black Bloc con el Primer Comando Capital, una organizacion ilegal que cuenta con varios integrantes, y que financian acciones ilegales en Sao Paulo y en otros estados del país, punto que es desmentido por los Blackk Bloc en su cuenta de facebook.

Los Black Bloc ya organizaron en febrero una protesta contra el Mundial que se saldó con enfrentaminetos con la Policía y más de cien detenidos.

sábado, 7 de junio de 2014

No hay esperanza para la infancia trabajadora de Somalia y Kenia


La pobreza se ceba en los más vulnerables. Más de la mitad de niñas y niños somalíes y kenianos trabajan jornadas mayores a 12 horas, en situación casi de esclavitud. En países sumidos en la miseria y el desempleo, sólo los infantes encuentran trabajos «estables»... y son de servidumbre

6 junio 2014

Nairobi, Kenia/Mogadiscio, Somalia. Halima Mohamed Ali cuenta con 12 años de edad y se despierta todos los días a las 5 de la mañana, pero no para ir a la escuela, sino para hacer de niñera de cinco pequeños. El mayor de ellos es sólo 2 años más joven que ella.

Halima comienza por preparar el desayuno, luego despierta a los niños, los baña y los viste para que vayan a la escuela o la madraza, una institución de enseñanza musulmana.

La guerra y el hambre de Somalia obligaron a Halima, y a miles de niños como ella, a abandonar el sueño de la educación y a convertirse en trabajadores.

La mitad de los niños y niñas de 5 a 14 años de edad del Centro y el Sur de este país trabajan, indican las últimas estadísticas del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por su acrónimo en inglés), correspondientes a 2011.

En Puntlandia y Somalilandia, que en los últimos 20 años gozaron de mayor estabilidad que otras partes de este país del llamado «Cuerno de África”», más de 25 por ciento de los niños trabajan.

Las tareas agotadoras para las que son contratados —trabajo manual y doméstico— pagan poco pero exigen mucho.

Halima trabaja de sol a sol, ya que cocina, plancha, lava los pisos, baña a los niños y finalmente los lleva a la cama antes de terminar la jornada. «Es un trabajo muy estresante», dice la niña que nunca puso un pie en un aula.

Le encantaría abandonar estos deberes y dedicarse a los libros, pero su sueldo mensual de 50 dólares es imprescindible para el sostén de su familia de cinco miembros, en la que sólo ella tiene empleo remunerado.

«Si pierdo 1 sólo día de trabajo, mi familia se va a la cama con hambre», dice Halima a Inter Press Service (IPS), rodeada por su madre y sus hermanas menores en uno de sus escasos mediodías de descanso.

Es una tremenda carga para una niña, pero en comparación con las penurias que debió soportar la familia Ali, que Halima trabaje no es el fin del mundo.

La familia es originaria del distrito de Dinsor, en la sureña zona de la Bahía de Somalia, a unos 266 kilómetros de Mogadiscio. En 2011 huyeron de allí por la hambruna, que costó la vida a casi 250 mil personas dedicadas al pastoreo, mientras una feroz sequía consumía el campo y provocaba la muerte de cientos de miles de cabezas de ganado.

Cuando finalmente llegó a Mogadiscio, la familia se refugió en un campamento improvisado llamado Badbaado, que significa «salvación» en somalí, junto con 50 mil desplazados más.

Al principio, recibían raciones de alimentos, refugio y asistencia médica, indica Halima, pero cuando la Organización de las Naciones Unidas declaró el fin de la hambruna en febrero de 2012, la ayuda casi desapareció.

Pocos desplazados consiguieron trabajo, ya que carecen de educación formal y no poseen otras habilidades que la agricultura o la cría de ganado. Entonces recurrieron a la única opción disponible: enviar a trabajar a sus hijos.

Aunque Halima está agotada al final de su jornada laboral de 17 horas, le alegra poder mantener a su familia.

Su historia es similar a la de tantos en este país de 10.2 millones de habitantes, según Mohamed Abdi, director del programa Somali Peace Line, una organización defensora de los derechos de la infancia.

«Cientos de niñas son traídas a Mogadiscio desde las zonas rurales donde hay pobreza y hambre… Para trabajar en hogares de clase media. Trabajan muchas horas a cambio de comida, alojamiento y sueldos bajos, que envían a sus familias», explica Abdi a IPS por teléfono.

«Afortunadas» como Halima reciben su sueldo, dice Abdi, pero son muchas más a las que se les retiene el magro pago durante meses [ellas] se encuentran aisladas de sus familias, sufren abusos y el trato de una esclava.

Abdi cree que la persistente violencia de este país, que tiene sus raíces en la guerra civil que estalló en 1991, asegurará un flujo constante de niños y niñas trabajadores, mientras las familias pierden sus empleos y la esperanza.

«Cuando tratamos de convencer a los padres de que no envíen a sus hijos a trabajar, nos piden fuentes alternativas de ingresos, mismas que no podemos ofrecerles», admite.

Más de 70 por ciento de la población tiene ingresos bajos, y 73 por ciento de los somalíes viven con menos de 2 dólares al día, según un informe publicado en 2012 por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.

El desempleo es uno de los más altos del mundo, ya que 54 por ciento de los somalíes de entre 15 y 64 años de edad se encuentran sin trabajo, agrega.



Manos pequeñas, sueldos pequeños

Además de la vulnerabilidad que supone el trabajo informal, como la jornada que no respeta ni las 8 horas, niños como Hassan Abdullahi Daule, de 11 años, también reciben salarios menores que los adultos, aun cuando desempeñen las mismas funciones.

Cuando su padre murió en 2012 en un atentado explosivo en Mogadiscio, Hassan —único varón de la familia— dejó la escuela y comenzó a trabajar en un taller mecánico. Allí labora 12 horas diarias para mantener a su madre y a dos hermanas menores.

Vestido con su «uniforme» —una camiseta del equipo de futbol Arsenal, empapada en aceite y con pantalones cortos haciendo juego—, Hassan dice a IPS que su tío le consiguió el trabajo para que su familia pudiera comer. Aunque le tienta renunciar y volver a la escuela, se siente responsable.

La educación es un recuerdo lejano, así que su única esperanza es hacer carrera como mecánico. Por ahora, sin embargo, le pagan mucho menos que a sus compañeros de trabajo, e incluso a veces lo obligan a hacer tareas de los demás sin recibir ni una sola moneda adicional.

«Cuando hay muchos autos para arreglar, gano 50 chelines somalíes diarios [unos 2,5 dólares]. En los días malos, sólo recibo el almuerzo y vuelvo a casa sin nada», dice Hassan, con gotas de sudor corriéndole por la cara.

«Los adultos ganan unos 150 chelines [75 dólares] por día, y a veces se quedan con mis ingresos por la fuerza. No hay nada que pueda hacer y nadie con quien quejarme, así que sólo puedo esperar a la próxima jornada de trabajo», agrega.

El director general del Ministerio de Desarrollo Humano y Servicios Públicos, Aweys Haddad, dice que la Constitución somalí prohíbe el trabajo infantil, y agrega que el gobierno ratificó recientemente una convención de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que prohíbe las peores formas de empleo infantil.

Pero hay muchos problemas para cumplir la ley, así que los compromisos asumidos se quedan en el papel. Diversos estudios e informes hablan de niños y niñas de sólo 5 años de edad trabajando en casi todos los sectores, desde la construcción hasta la agricultura.

En el Sur del país, niñas y niños son explotados para la guerra, por ejemplo, como guardias en puestos de control o como terroristas suicidas, y también trabajan en la calle, lavando automóviles, lustrando zapatos y vendiendo qat, una planta que contiene un estimulante similar a la anfetamina.

«El gobierno cree que una mayor asistencia a la escuela puede ayudar a eliminar el trabajo infantil. Estamos en vías de aplicar programas destinados a llevar a más niños a las aulas», declara el ministro Haddad a IPS.

«Pusimos en marcha la iniciativa Vuelta a la Escuela, que tiene como objetivo brindar educación gratuita a 1 millón de niños», agrega. Sin embargo, estos planes aún no dan frutos. Unicef señaló que sólo 710.860 de un total de 1,7 millones de niños en edad escolar están matriculados en un centro educativo.

Sin la interrupción drástica del círculo vicioso que perpetúa el trabajo infantil, el futuro no ofrece esperanzas

Muhyadin Ahmed Roble/IPS